Jiménez D/ Enfermería Investiga Vol. 8 No. 3 2023 (Julio – Septiembre)
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aplicación de un tratamiento, con base en ello se identificó lo
siguiente:
Con relación a las características epidemiológicas, el grupo
etario con mayor predominio de casos fueron los menores de
12 años, con un porcentaje de 46,46%, en cuanto al sexo, se
determinó que los más afectados fueron los hombres con un
61,42%, según la procedencia de los pacientes, su gran
mayoría corresponde al área urbana representando un
79,53%, por otro lado, la casa es el lugar en donde más
accidentes se suscitaron con un 88,98% el trimestre del año
con mayor cantidad de casos fue el de abril-junio con el
26,77%.
Resultados que concuerdan con el estudio realizado por
Angulo en 2018 en la ciudad de Guayaquil, en donde
determinaron que el grupo etario con más casos corresponde
a los preescolares de entre 2 - 5 años, con un 46,38%, el sexo
masculino destacó representando el 63,38%, el 83,41% de los
pacientes corresponden a la zona urbana; además, los
domicilios fueron donde se dieron con más frecuencia los
casos con un 91,55%; sin embargo, difieren en el mes con
mayor incidencia, en este caso se presentaron en diciembre
con el 15% (17).
También mantienen datos similares con otro estudio realizado
por Cifuentes et al, en 2018 en Guatemala, en el cual
determinaron que el grupo de edad de 0 a 9 años predominó
con un 46,38%, el sexo masculino sobresalió representando el
60,09%, mientras que el lugar con mayor frecuencia de casos
fueron los domicilios con un 73,81% y el 11,86% corresponde
al mes de noviembre, dato que no concuerda con la presente
investigación (18).
La Organización Mundial de la Salud considera a las
quemaduras como la quinta causa más común de lesiones no
fatales durante la infancia; sin embargo, las mujeres adultas
también son especialmente vulnerables a las quemaduras.
Uno de los mayores riesgos en los niños son las negligencias
por parte de los padres, al dejarlos solos o por no tenerles una
adecuada supervisión, ya que en esta etapa los niños exploran
el medio que los rodea exponiéndose a escenarios de riesgo
que pueden llegar a ser catastróficos. De hecho, un número
considerable de casos se debe al maltrato infantil. Por otro
lado, según los datos más recientes, la mortalidad por
quemaduras es ligeramente más elevada en las mujeres, ya
que ellas están más expuestas a aquellos riesgos asociados
con el uso de cocinas, violencia autoinfligida o interpersonal;
sin embargo, los hombres son más propensos a desarrollar
una quemadura en el lugar de trabajo, puesto que están
expuestos a incendios, productos químicos, electricidad, etc.
Las familias que habitan en aquellos países con bajos ingresos
económicos tienen mayor probabilidad de sufrir quemaduras,
debido al hacinamiento, a la falta de medidas de seguridad
adecuadas, a problemas de salud subyacentes, consumo
excesivo de alcohol, tabaquismo, entre otros; sin embargo, el
sufrir quemaduras también guarda correlación con la posición
socioeconómica de cada familia independientemente del país
donde habitan (13,19,20).
Con respecto a las características clínicas de los pacientes con
quemaduras, el agente causal más común a lo largo de estos
2 años fue el agente físico, el cual representó el 92,91% de los
casos, el brazo derecho fue la zona más afectada con un
37,01%; además, el grado de quemaduras con mayor
incidencia fue el de segundo grado, con un 84,25%, así mismo
del 10-19% fue el porcentaje de la superficie corporal más
representativa de todos los casos con el 47,24% y el nivel de
gravedad de la quemadura con más casos según el índice de
Garcés fue el moderado con un 56.69%.
Dichos resultamos son semejantes al estudio realizado en
Cuba por Cecilia et al., en 2019 en el cual determinaron un
predominio de las quemaduras provocadas por líquidos
calientes con un 43% (21). De igual manera mantienen relación
con el estudio realizado por Cueva en 2020 en Perú en el cual
la mayor cantidad de casos por quemaduras se presentaron
en los miembros inferiores; sin embargo, difiere con el
resultado de la superficie corporal quemada, en el cual
determinaron que en su mayoría presentaron lesiones
menores del 10% (22), por otro lado concuerda con el grado
de quemadura siendo el de segundo grado el más
representativo con un 79,62%. Además, aquellos datos
coinciden con otro estudio realizado por Albornoz et al, en 2013
en Chile, en el cual obtuvieron que el 28,4% de los casos
fueron categorizados como moderados (23).
Las quemaduras se pueden originar por una gran variedad de
agentes, tales como físicos, químicos y biológicos. Con
respecto a los agentes físicos estos son los más comunes ya
que son considerados como aquella forma de energía que se
encuentra presente en el entorno con la capacidad de
interactuar con la materia, mismos que se clasifican en
térmicos, eléctricos y radioactivos (24). Existen algunas áreas
del cuerpo como el cuello, manos, pies, genitales, zona
perineal y zonas de flexión que son consideradas como zonas
especiales o de mayor gravedad debido a que tienen un mayor
riesgo de secuelas funcionales y estéticas (25). La extensión
de las quemaduras se debe calcular mediante un porcentaje;
sin embargo, en ciertas ocasiones puede haber dificultad para
su cálculo por ello existen una variedad de métodos para
evaluar su extensión y no caer en una sobreestimación de la
extensión real de las quemaduras (26).
Además, las quemaduras cuentan con una clasificación según
la profundidad, con el único de fin de determinar el espesar de
la piel que ha sido comprometido ya que puede afectar desde
la epidermis que corresponde a quemaduras de primer grado
hasta las estructuras óseas que son ya de tercer grado (27).
Por lo cual se debe determinar de forma consecutiva la
gravedad de las quemaduras tomando en cuenta la edad del
paciente, la profundidad y porcentaje de la quemadura lo cual
ayudará a conocer cuál es el pronóstico de curación y la
probabilidad de complicaciones (28).
Por otro lado, se estableció que el 1,57% de los pacientes
fallecieron por quemaduras, en comparación con el estudio
realizado por Mestas en 2016 en Perú, en el cual determinaron
que el 5% de los pacientes fallecieron por la misma causa (29),
siendo así este indicador de letalidad ayuda a establecer la
dimensión de una determinada patología en un periodo de
tiempo preestablecido con el fin de observar y disminuir
aquellos factores que intervengan en el incremento de la
problemática (30).
CONCLUSIONES
Las quemaduras continúan afectando a los diferentes grupos
etarios, pero con mayor frecuencia a la población masculina e
infantil, ya que están expuestos a más escenarios de riesgo,
siendo el segundo trimestre del año en el cual se presentaron
con mayor frecuencia los casos por lo que la prevención es
fundamental sobre todo en los hogares procedentes de áreas
urbanas donde se dan la mayoría de eventos, por lo que
resulta crucial la aplicación de medidas de seguridad. Dichas
lesiones se presentan con una gran variedad de características
en cuanto a su presentación clínica, siendo diversas las causas
por las cuales se presentan; sin embargo, los agentes físicos
siguen siendo los más comunes, presentándose en su mayoría
en los brazos, ya que normalmente se realizan las actividades
con las extremidades superiores, por lo tanto, están más
expuestas a sufrir estas lesiones; además, el grado y