Humanización de la salud: Un desafío para el sistema sanitario en contextos de multiculturalidad
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Resumen
La humanización de la atención sanitaria es un tema abordado frecuentemente en muchos países del mundo, Estos coinciden en su prioridad, reconociendo la vulnerabilidad de la persona enferma y el derecho que ella tiene, a recibir una atención propia de su condición humana, con respeto y dignidad, independientemente de cualquier condición biológica, psicológica o social1. No obstante, el carácter agitado del contexto hospitalario, muchas veces conlleva a incongruencias que se manifiestan en dificultades para relacionarse con la persona enferma, trato deshumanizado e insatisfacción de los pacientes atendidos.2,3 Es posible que, mientras los avances tecnológicos han mejorado notoriamente el conocimiento que se tiene sobre las distintas enfermedades y sus formas de curación, la tendencia en el personal de salud es enfocarse más en la atención de las fallas físicas del organismo, que en la persona que padece la enfermedad.2 Pareciera que el modelo imperante reduce lo humano a lo biológico, quedando relegado el carácter holístico de atención en salud.4 Este tema adquiere relevancia en países de diversidad étnica, porque las barreras culturales establecidas entre los trabajadores sanitarios y los pueblos indígenas son factores que frecuentemente obstaculizan la atención en salud.5 Asimismo, porque las actitudes de los profesionales, algunas veces estereotipadas con respecto a grupos sociales en particular,6 ocasionan en los usuarios una escasa voluntad para utilizar los servicios médicos convencionales,7 así como también, retraso en las subsiguientes consultas y discontinuidad del tratamiento, profundizando las desigualdades en salud.8 De hecho, las barreras culturales entre los miembros de las etnias indígenas y el personal de salud, sesgados a favor de las intervenciones sanitarias occidentales, pueden ser un impedimento para que ellos busquen la atención que necesitan.9 Asimismo, las dificultades de comunicación con el personal representan las principales causas de insatisfacción con el sistema convencional, lo que además repercute negativamente en el proceso de curación y la adhesión al tratamiento.3 Por ello, diversas organizaciones internacionales recomiendan a las instituciones sanitarias, contar con personal capacitado en la atención y continuidad de los cuidados de salud a las poblaciones indígenas.10 Alentando, además, la incorporación de la medicina tradicional en la atención primaria, para promover el acceso de los grupos culturalmente diversos a los servicios de salud.11 La Red Integrada de Salud del Ecuador, atiende a usuarios provenientes de una gran variedad de entornos culturales. Por ello, en el Plan Nacional Toda una Vida,12 se destaca la importancia de desarrollar una visión integradora que responda adecuadamente a las necesidades humanas, en el fortalecimiento de la multiculturalidad. Con este plan, el Estado se ha propuesto contribuir al cierre de las brechas de inequidad, mayormente expresadas en la población indígena,13,14 necesitada de atención para superar las múltiples formas de privación social en salud.