Accidentes laborales en Enfermería
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Resumo
Dentro del ámbito clínico asistencial el personal del área de enfermería al desempeñar sus actividades, se expone a factores de riesgos de diversa naturaleza, biológicos, químicos, físicos, mecánicos, disergonómicos y psicosociales, cuya dinámica determina la ocurrencia de enfermedades y accidentes de trabajo.
A propósito de accidentes laborales, estos son sucesos imprevistos que producen en el trabajador lesiones resultantes de una acción determinada en el curso o en ocasión del trabajo; son numerosos los factores que contribuyen en su aparición y pocas veces, por no decir ninguna, los accidentes ocupacionales son el resultado de una única causa o acción (1).
La exposición al riesgo de accidentes dentro del contexto clínico asistencial, no es la misma para todo el colectivo de trabajadores, sea en centros hospitalarios o extra hospitalarios, varía en función del tipo de trabajo desempeñado por cada categoría profesional, destacándose la mayor incidencia en el personal que presta asistencia sanitaria directa. La enfermería representa una de las ocupaciones dentro del sector sanitario que, en términos de exposición a riesgos ocupacionales, dominan entre las demás profesiones del área de la salud.
Un recorrido entre las numerosas evidencias científicas publicadas en la literatura reciente muestra un perfil de accidentalidad en profesionales y técnicos de la enfermería , muy variado, en los que destacan los siguientes : exposición accidental percutánea y mucocutánea a sangre y otros fluidos biológicos potencialmente infecciosos; lesiones por sobreesfuerzos físicos; resbalones y caídas; lesiones por violencia; traumas físicos por contacto con fuentes de energía; quemaduras térmicas o químicas; asfixia y lesiones por contacto accidental con agentes químicos tóxicos (2-9).
El accidente que continua observándose con la mayor prevalencia en enfermeras es el contacto percutáneo a sangre y otros fluidos biológicos ( pinchazos, cortaduras y laceraciones, con agujas y objetos punzo cortantes), seguido de contacto muco-cutáneo ( salpicaduras y splash de sangre o fluidos biológicos en membranas mucosas y piel no intacta); las lesiones musculo esqueléticas por sobre esfuerzo en la asistencia de pacientes, lesiones por resbalones , tropiezos y caídas y violencia verbal y física ocupan frecuencias que engrosan la tasa de accidentalidad en las enfermeras (2,4-5,8- 10).
En relación a la exposición a sangre y fluidos corporales, es bien reconocido en entornos sanitarios como un peligro ocupacional que impacta a miles de trabajadores del cuidado de la salud por su potencial para transmitir patógenos sanguíneos, entre ellos, virus de la hepatitis B (VHB), hepatitis C (VHC) o virus de inmunodeficiencia humana (VIH), debido a contacto percutáneo y contacto de mucosas o piel no intacta, con sangre, tejidos u otros fluidos biológicos potencialmente infecciosos (11-12).